La traducción y sus tres claves lingüísticas

Aspectos imprescindibles del proceso de traslación textual:

Creo que no estoy descubriendo la pólvora cuando afirmo que a la hora de traducir un texto a otra lengua (traducción interlingüística [1.]) hay que tener en cuenta, en una buena traducción claro está, diversos aspectos lingüísticos y otros no lingüísticos que se consideran de especial relevancia para que el texto meta [2.] (TM) adquiera significado y tenga sentido en la lengua a la que se transfiere.

Octavio Paz define el concepto de traducción de forma clara, sencilla y directa. El hecho de que lo ejemplifique es, a mi modo de ver, un recurso cuanto menos explícito en el que no se recurre a tecnicismos que en ocasiones más que ayudar, entorpecen la comprensión de la explicación terminológica.

Aprender a hablar es aprender a traducir. Por ejemplo, cuando un niño pregunta a su madre por el significado de una palabra, lo que realmente le pide es que le traduzca a su lenguaje el término desconocido”.

En efecto, en eso consiste la traducción, pero ¿qué elementos intervienen en el proceso de traslación de una lengua a otra? ¿Qué factores se han de tener en cuenta?

Cuando encargan una, lo primero que hace el trujamán es acercarse al texto original (TO), leerlo, interpretarlo y contextualizarlo, para así tener claro el sentido general del texto. Una vez hecho esto, tratará luego de trasladarlo, darle la forma que convenga y contextualizarlo teniendo en cuenta, ahora sí, diversos factores extralingüísticos que mucho tienen que ver con el contexto y situación que rodeen a la lengua meta o de llegada (LM).

En definitiva, son tres los aspectos lingüísticos que todo proceso de traslación conlleva:

  • Texto: el texto en sí debe leerse, tocarse, percibirse, tacharse, reescribirse.
  • Interpretación: el glosador debe interpretar el TO, entenderlo para después poder trasladarlo a la LM.
  • Contexto: el entorno lingüístico que le da sentido y del que depende el texto ha de analizarse en profundidad.

Así que si eres un traductor novel o estás en proceso de serlo, he aquí unos cuantos consejos que nunca dejarán de servirte. ¡Ah! Y de los rasgos extralingüísticos nos encargaremos en otro post.

 

[1.] Según Jakobson, hay tres formas de traducción: La interlingüística es aquella que tiene lugar entre lenguas. Pero hay además otras dos igual de relevantes: la intralingüística o reformulación de los signos lingüísticos por medio de otros signos de la misma lengua y la traducción intersemiótica o traslado de los signos lingüísticos a sistemas de signos no verbales (por ejemplo, al lenguaje de sordomudos).

[2.] Al igual que la lengua meta es aquella a la que se traduce, el texto meta es aquel otro que se transfiere.

Los comentarios están cerrados.